Blog
DE MADRID Y DEL GRIFO
En nuestro blog encontrarás consejos para ahorrar agua y conocerás cómo trabajamos para llevarla con la mejor calidad hasta tu grifo en Madrid
DE MADRID Y DEL GRIFO
En nuestro blog encontrarás consejos para ahorrar agua y conocerás cómo trabajamos para llevarla con la mejor calidad hasta tu grifo en Madrid
DE MADRID Y DEL GRIFO
Suscríbete al blog
RUTA POR LAS FUENTES MÁS EMBLEMÁTICAS DE MADRID
Uno de los tradicionales elementos distintivos de Madrid siempre ha sido el número y la calidad de sus fuentes. Un patrimonio que se extiende por todos los rincones desde la capital hasta los municipios más pequeños. A continuación, te proponemos un recorrido por algunas de las fuentes más famosas de Madrid.
LA FUENTE DE LA CIBELES
La Fuente de la Cibeles se conoce internacionalmente porque aparece en televisión cuando gana el Real Madrid. Pero eso pertenece solo a su historia reciente. Fue construida por Francisco Gutiérrez en 1782 durante el reinado de Carlos III, y esta estatua pertenecía a un plan mucho más ambicioso de Ventura Rodríguez.
Cibeles pertenece a la mitología clásica y representa la Tierra. En esta pieza va acompañada de los leones Atalanta e Hipómenes, los mismos que vemos en el Palacio del Congreso.
LA FUENTE DEL ÁNGEL CAÍDO
¿Sabías que Madrid es la única ciudad del mundo con una fuente dedicada al Diablo? Es uno de los monumentos que más llaman la atención de la ciudad, y tiene una historia curiosa detrás. Lucifer corona este monumento recogiendo el inicio del mito de la Caída.
Hacia 1877, el escultor madrileño Ricardo Bellver se vio inspirado por el libro «El paraíso perdido», de Milton. Presentó la obra en la Exposición Nacional de Bellas Artes y ganó la Medalla de Primera Clase. El Estado compró la estatua, y en París se realizó una fundición en bronce.
Durante poco tiempo pasó a formar parte del Museo del Prado, pero en 1879 el Ayuntamiento de Madrid pidió usarla como decoración en el Parque de El Retiro. Francisco Jareño diseñó el pedestal, y Lucifer fue colocado en este parque. Desde entonces ha atraído la atención de cientos de turistas.
FUENTE DEL MONUMENTO A CERVANTES
El Monumento a Cervantes, y la fuente en la que está contenido, es un lugar maravilloso de la ciudad de Madrid. Poca gente sabe el motivo de una estatua así en un lugar como este, y lo que representa. Por un lado, tenemos a Cervantes, sentado en un trono esculpido bajo el obelisco. Frente a él, Sancho y Quijote cabalgan a lomos de sus bestias. En la parte trasera del obelisco localizamos veinte escudos, uno por cada país que en 1915 hablaba español. En la parte más alta del monolito se observa una bola del mundo rodeada por cinco mujeres leyendo. Una mujer por continente.
Así, la fuente no es “solo” un monumento a Cervantes, sino una obra dedicada al español y su difusión por el mundo.
FUENTE DE APOLO O DE LAS CUATRO ESTACIONES
Localizada cerca de la fuente de La Cibeles, la Fuente de Apolo muestra al dios grecorromano coronando una columna. Bajo ella aparecen representaciones de las cuatro estaciones: un canasto con flores, un haz de espigas, una corona de pámpanos y un racimo de uvas.
Esta estatua está “escondida” entre ocho carriles de circulación. Su acceso, aunque sencillo, se realiza por el nervio verde del Paseo del Prado. Si uno camina por cualquiera de las dos aceras laterales, se perderá la obra. Sin embargo, si desde Cibeles bajamos por el pasillo verde, disfrutaremos de un gran jardín abierto con la fuente en su centro.
FUENTE DE LAS CONCHAS
Quizás sea una fuente no muy conocida en Madrid, pero se podría decir que es una de las más bellas.
La Fuente de las Conchas fue levantada en el siglo XVIII, a partir de un proyecto del arquitecto Ventura Rodríguez. Está labrada en mármol y su forma recuerda a la de un frutero.
Situada junto al Palacio Real, en los jardines del Campo del Moro, esta fuente consta de cuatro cuerpos principales, que se disponen verticalmente. El inferior, el más ancho de todos ellos, integra un pilón circular, en cuyo interior se asientan las esculturas de tres tritones niños. Cada uno de ellos sujeta una concha, motivo que también está presente en el siguiente cuerpo y que termina dando nombre a todo el conjunto. En la parte central del pilón descansa una base circular, sobre la que se eleva un grupo escultórico de tres tritones ancianos, cuyas colas (que adoptan en su parte final la forma de una cabeza de delfín) derivan agua hacia diferentes conchas y éstas, a su vez, hacia el pilón. Se trata del segundo cuerpo distinguido.
Los tres tritones ancianos sostienen una taza, donde se apoya el penúltimo de los cuerpos señalados. Aquí aparecen tres ninfas, coronadas por una nueva taza, de menores dimensiones que la anteriormente mencionada.
Sobre esta última taza se sitúa la escultura de un niño abrazado a un delfín, del que brota un surtidor, que remata el conjunto. Es el último de los cuerpos diferenciados.
FUENTE DE NEPTUNO
Junto a la Cibeles, Neptuno es una de las fuentes más bellas y majestuosas de Madrid. Ambos dioses ocupan puestos prominentes dentro de la jerarquía mitológica griega y rivalizan en el terreno deportivo, ya que la afición del Atlético de Madrid celebra sus victorias en la plaza del dios del mar.
En cuanto al conjunto monumental, sobre una base rocosa emerge la carroza con forma de concha, tirada por los dos hipocampos, símbolos de las tormentas y del mar agitado. La obra representa al dios del mar, con su tridente, sobre un carro en forma de concha tirado por dos caballos marinos.
De las tres estatuas de Ventura Rodríguez (Cibeles, Neptuno y Apolo) fue la más accidentada. Le fue encargada a Juan Pascual de Mena, pero falleció nada más terminar la pieza principal, el Apolo. El resto tuvo que ser completado por otros escultores. Sin embargo, el acabado es destacable y no parece haber sufrido tanto traspiés histórico.
Como parte del proyecto original de Ventura Rodríguez, ambas fuentes fueron, en un principio, enfrentadas, mirándose la una a la otra en un lateral del Paseo del Prado. Pero a finales del siglo XIX (1898), tanto Cibeles como Neptuno, experimentaron procesos de reestructuración y traslado, pasando finalmente a ocupar el centro de la Plaza de la Cibeles y Plaza de Cánovas del Castillo, respectivamente.
Aquí termina nuestro recorrido por algunas de las fuentes emblemáticas de la ciudad, pues hay otras muchas en Madrid. Y tú, ¿conocías alguna de estas fuentes? ¿Cuál es tu favorita? ¿Existe alguna otra fuente de Madrid que te guste especialmente? Déjanos tu comentario.
Suscríbete al blog